martes, 1 de junio de 2010

Antes de

"¿Por qué verborragia? Ya sé, el sufijo que denota algo incontrolable, excesivo... Pero yo quiero hablar sobre la rapidez. Soy controlable, ahora, pero rapidito, como un ave. Entonces, soy verbodinámico."

Diálogos con un hombre de metal


A veces pienso que es un mal familiar. Todo viaje me mantiene en una expectativa constante y antes de partir las ganas se disipan. Hay un desánimo general y sin razón aparente, una procrastinación de los preparativos y cierta angustia, inevitables en la víspera. A todos nos pasa eso, quizás sea un poco genético.

Una vez se lo comenté a alguien, en vísperas de un viaje. Rato después, en la feria de Tristán Narvaja, tomó el libro de Levrero que yo le había regalado y se repetía en una mesa de venta y lo abrió en determinada página. Me hizo leer la oración que describía perfectamente mi sentimiento. Nos miramos y sonreímos, quizás sintiendo cosas que hace demasiado tiempo no me pasan.

El curso de los días ha cambiado demasiado desde la última vez que partí hacia algún sitio. Partir, partirme en dos, en varios pedazos, muy justo. Partir ciñéndome a pocos planes, rezagando los análisis y las nostalgias, armando agendas.

Con un pie a cada lado y temiéndole a ciertos fantasmas, apuro el paso y trato de no pensar más allá del aquí y ahora. Hago lugar para los regalos que preparé con mucho cariño, hago lugar para papeles y lápices, para sacudones del alma y risas.

Recuerdo las palabras de cierto hombre de metal, quiero mudarme a verbodinámica, quiero estrenar mi cuerpo de arena en otra ciudad. Me visto, entonces, de mujer nueva, limpio las telarañas, soplo el polvo de mis zapatos y me zambullo en la niebla del después.

5 comentarios:

María Mácula de Rojo dijo...

ahh Levrero! me gusta profundamente. que el viaje te sea feliz y provechoso!

eMiLiA dijo...

Bon voyage!

Me gustó ese juego de partir y partirse.

Un abrazo!

GonSaa dijo...

me gustó mucho mucho!

Pablo Nuñez dijo...

Querida hermana, hasta la vuelta! besos

Georgia SinClaire dijo...

bueno... bastante bueno.

"el hombre de metal" me hace acordar a mi con esas deducciones... (seguro menos insufrible que yo eh... jajaja)